Esta liberación reconoce dos cosas, la primera, es la necesidad de superar la Opresión y todo lo que con ello se genera: carencias, limitaciones, miseria. La segunda, es poner de relieve el reconocimiento del saber popular, la igualdad social y el fortalecimiento de los recursos que tienen las personas
Continuando con los valores, desde una perspectiva comunitaria, Nelson y Prilleltensky (2003) introducen la siguiente clasificación: los personales, relacionales y colectivos. Los primeros y terceros incluyen todas las fuentes de influencia que se dan en una comunidad, individuales o subjetivas, intersubjetivas o colectivas: el derecho a la constitución de la identidad personal y social, la libertad, la liberación, la igualdad, la justicia, la paz, el bienestar. Los segundos, relacionales son característicos comunitarios: la colaboración, la participación, la solidaridad, la unión, el dialogo, la diversidad, el respeto.
Aun así, es necesario tener en cuenta que estos valores difieren en cada grupo específico, debido la identidad social o comunitaria, compuesta por personas con idiosincrasias, modos de ser y hacer propios. Por ello, los valores deben cumplir cuatro requisitos para orientar el trabajo comunitario.
- Guiar los procesos contundentes hacia un escenario ideal.
- Evitar el dogmatismo y el relativismo.
- Los valores deben ser complementarios y no contradicciones entre sí
- Promover el bienestar personal, colectivo, y relacional.
En fin, lo que se busca por medio de las transformaciones sociales, es la construcción de valores que cumplan tales requisitos, permitiendo el mejoramiento del bienestar del grupo comunitario. Es buscar la “AUTOPÍA”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario